Una de las tareas más importantes que tenemos en una asesoría fiscal y contable de Majadahonda es la de informar a nuestros clientes, especialmente a los trabajadores autónomos, de los gastos derivados del ejercicio de su actividad que se pueden deducir en su declaración de la renta anual. Buena parte de ellos coinciden con los gastos que serían desgravables para una sociedad para el impuesto de sociedades, pero vamos a tratar de simplificar esta información.

Los gastos han de estar justificados mediante facturas, aunque en ocasiones pueden valer simples recibos o tickets y deben estar contabilizados en los libros de gastos, cosa ésta de la  que nos encargamos en nuestra asesoría fiscal y contable de Majadahonda. Pero han de ser también gastos directamente relacionados con la propia actividad desarrollada por el autónomo, y no con su vida privada.

Los gastos más habituales serán, por tanto, las compras de mercancías, los pagos salariales a sus empleados, incluyendo también los pagos a la Seguridad Social, alquileres y reparaciones de equipos necesarios para realizar la actividad, servicios de profesionales contratados (aquí entra nuestra gestoría). No se puede olvidar de los gastos financieros de préstamos o anticipos recibidos, ni las amortizaciones de edificios, maquinaria o herramientas que haya tenido que adquirir para el desempeño de su profesión.

Muchos de los trabajadores autónomos que creen que su contabilidad es una tarea sencilla, pronto terminan por descubrir que están soportando una carga impositiva mayor de lo que les corresponde al no deducirse correctamente todos los gastos que genera su actividad profesional. Permite que seamos los técnicos de Gestoría y Asesoría Galán quienes nos encarguemos de tus cuentas, comprobarás que merece la pena.